El próximo domingo 25 de octubre España y el resto de países europeos atrasarán las manecillas del reloj una hora. A las 03:00 serán las 02:00. Este cambio al conocido como “horario de invierno” además de aportar a todos una hora más de descanso, también traerá beneficios en el ámbito laboral.

El objetivo principal que tiene este cambio en el reloj es aprovechar al máximo la luz solar durante el día ya que anochecerá antes. Por este motivo, llegar a primera hora a la oficina supondrá menos esfuerzo ya que costará menos levantarse por las mañanas.

Con el horario de invierno, la luz se vuelve un elemento fundamental ya que ayuda a regular procesos fisiológicos, el estado de ánimo y hace aumentar la memoria y la concentración. El hecho de contar con menos horas de luz y que la gran mayoría de ellas se concentre en la mañana hace que la persona sea más productiva, trabaje con luz solar y, por las tardes y noches, puedan pasar más tiempo en casa con su familia de manera relajada.

Aún así, cada persona tolera de una manera diferente el cambio de hora y aunque el ser humano está muy acostumbrado a los cambios y se adapta bien a ellos, siempre hay pautas que ayudan a que la transición del horario estival al invernal sea lo menos perjudicial posible. Entre esos consejos se encuentran:

Dormir entre siete u ocho horas. Para conciliar el sueño hay pequeños trucos como adelantar el horario de cena o hacer ejercicio.

-Si te cuesta acostumbrarte, exponte a la luz solar y ayuda a tu reloj biológico a ajustarse.

Tranquilidad. Te costará seguir tu rutina, así que los primeros días tómate el día a día con más calma.